En el año 2000, cuando los bancos todavía eran instituciones respetadas, Jérôme Kerviel, de 23 años, es contratado como empleado en la Société Genérale de París. No tarda en escalar y manejar carteras de clientes en la bolsa. En el año 2008 el mundo se ve sacudido por la pérdida más grande que ha sufrido un banco jamás: 4,9 billones de euros. Se acusa a Jérôme Kerviel. ¿Cómo es posible que un joven broker acabe siendo el único culpable de este salvaje escándalo financiero? Ésta es una historia real sobre
la avaricia fuera de todo control
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